La “Revolución Wonderbra” se inicia en el Reino Unido, único país europeo en el que estaba comercializado el producto. Hasta 1992, Wonderbra contaba con una base de consumidoras fieles y mantenía estables sus ventas, pero el cambio de la moda hizo variar su trayectoria. Un artículo publicado por Vogue en diciembre de 1991 dio nueva vida a la marca. Volvieron a ponerse de moda los escotes pronunciados, hasta el punto de que las principales revistas de moda femeninas elevaron a Wonderbra a la categoría de pieza esencial para conseguir un escote atractivo: …” todas las mujeres deberían tener un Wonderbra en su guardarropa”....